Durante la década del ’90 el presidente Carlos Menem firmó 3 decretos por ventas de armas en forma ilegal. Argentina era uno de los cuatro garantes oficiales de la paz del Tratado de Río de Janeiro. Vendiendo armas a Ecuador en su conflicto armado con Perú, nuestro país incumplió su compromiso internacional y faltó con sus obligaciones, de acuerdo al derecho internacional.
Entre 1991 y 1994 se habían desviado ya toneladas de armas de las fuerzas armadas nacionales hacia Croacia durante su guerra con la ex Yugoslavia. Esta venta habría sido ilegal ya que por entonces las Naciones Unidas aplicaban un embargo a la ex Yugoslavia. A este hecho se lo denominó: »Operativo Ejército Argentino».
Una serie de pruebas, desde armas hasta contabilidad pasaban por la Fábrica Militar de Río Tercero y el método para ocultar el faltante de armas vendidas fue la voladura de la fábrica el 3 de noviembre de 1995.